he vuelto al banco del parque
donde me contaste más
de lo que te gusta confesar
no enseñaste tantas cartas
en tu juego de misterio,
delirio, ficción y azar
miento cuando digo
que no me acuerdo de tu voz:
oigo tu risa en todas partes
y no me ayuda a respirar
en tu cartel de se busca
te dibujan y definen
retales de nada, vacío,
interrogantes y ausencias
un error más
entregarte tan poco
por conservar tu impunidad;
me diste en realidad
un lienzo en blanco
para reflejarme, no doler
y no acertar a descifrar
recorto tus millones de palabras
siempre referencia de otra cosa,
otro sitio, muchas causas y
más consecuencias
para unir las pistas,
seguir tu estela,
desoír los consejos
y descubrir(te) el velo
(entreabierto, si quieres,
pocas veces transparente,
casi siempre reflejo)
que nos separa de la verdad
Comentarios
Publicar un comentario