Recogeré el colchón del suelo,
lo pondré en alto
y seguiré durmiendo dentro
del sobre que mece todas las cartas
que no te dará el cartero.
Levantaré el colchón del suelo
para alejarlo del centro de la tierra,
del centro de tu pecho,
del infierno de la soledad y del hastío
que siente ahora que está hueco.
Lo llevaré lejos del cálido invierno
que tus labios tiñeron de rojo
y lo traeré hasta el verano helado,
menos azul de lo que me gustaría,
que nos queda a mí y al viejo colchón sin alas
que solo susurra tu nombre.
lo pondré en alto
y seguiré durmiendo dentro
del sobre que mece todas las cartas
que no te dará el cartero.
Levantaré el colchón del suelo
para alejarlo del centro de la tierra,
del centro de tu pecho,
del infierno de la soledad y del hastío
que siente ahora que está hueco.
Lo llevaré lejos del cálido invierno
que tus labios tiñeron de rojo
y lo traeré hasta el verano helado,
menos azul de lo que me gustaría,
que nos queda a mí y al viejo colchón sin alas
que solo susurra tu nombre.
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